“He sido
deportado acá por decir la verdad en mi pobre España, envilecida y degradada
por una dictadura de generales que no es lo peor que sean sifilíticos borrachos
y jugadores sino que son imbéciles, casi analfabetos, respirando odio y envidia
a la inteligencia. El Primo de Ribera (sic), un macho con menos seso que un
carnero, un loco impulsivo de los que primero dispara y después apuntan, se
pasa las noches en casas de prostitución. El último escándalo fue por obligar a
un juez a que soltara una prostituta que vendía cocaína. No es posible imaginar
el grado de vileza a que ha caído España y la cobardía de los españoles. El
ejercito, vencido en Marruecos, y corroído por toda clase de vicios soporta a
ese botarate que es un monstruo de frivolidad atacado de cretinismo tremens.”
Miguel de Unamuno.