“Pero a estas
alturas tenemos el derecho a preguntarnos si la importancia de los arquetipos
para la conciencia del hombre arcaico y la incapacidad de la memoria popular
para retener lo que no sean arquetipos no nos revelan algo más que la
resistencia de la espiritualidad tradicional frente a la historia; si no nos
revela la caducidad, o en todo caso el carácter secundario, de la
individualidad humana en cuanto tal, individualidad cuya espontaneidad creadora
constituye, en último análisis, la autenticidad y la irreversibilidad de la
historia. En todo caso es notable que, por un lado, la memoria popular se
niegue a conservar los elementos personales, «históricos»”, de la biografía de
un héroe, mientras que, por el otro, las experiencias místicas superiores
implican una elevación del Dios personal al Dios transpersonal.”
Mircea Eliade.