“Si los lémures no hubieran sobrevivido ni podido alimentarse de
bayas en sus agujeros mientras desaparecían los dinosaurios, no estaríamos aquí.
No hay una intención oculta en esta historia. Pero el resultado es que aumenta
la complejidad. Si existen planetas que se han desarrollado en las mismas
condiciones que la Tierra ,
no es improbable que esos seres existan y que no se diferencien de nosotros más
que un avestruz de un cocodrilo: cuatro miembros, dos ojos, un cerebro,
sistemas locomotrices. Y hay una fuerte posibilidad de que estén en el mismo
punto evolutivo que nosotros… No se puede afirma que exista una ley que impulsa
a la complejidad. Pero comprobamos que alguna cosa se organiza y conduce a una
inteligencia cada vez mayor y más desmaterializada. Quizás la historia de la
evolución es el artefacto de una conciencia que adquiere conciencia de sí
misma.”
Joël de Rosnay