CAMINOS DE HIERRO
Nidos de
locomotoras
las
estaciones
libran los tránsitos
Arcos
puertas de las
ciudades
como el cielo
palpitantes a
todas horas
en los centros bajo las humaredas
Belleza del esfuerzo
He aquí la velocidad bien encauzada
hija
de la voluntad
Adioses Bienvenidas
Lágrimas Alegría
Y
también
la indiferencia muda que
rueda y rueda
en los días
sobre los
caminos
Todo va a alguna parte
El
tiempo desfila
vestido de todos los paisajes
todas las ciudades del mundo
Es la flecha del tren
que
se dirige
fuerte
sobre su fin.
Detrás
el último vagón
engrendra
de nuevo el espacio
Rafael Lasso de la Vega.