Porque
el subjetivo es el único que
expresa el tiempo de la hipótesis y de
lo posible, lo no-real.”Si fuese a París esta noche, iría a la Comédie Française.”
Debe reconocerse que “Si fuera” es un subjuntivo. De hecho no voy a París, pero
podría ir. Si esta condición se diese, entonces, como expresa el condicional
que sigue, iría a la Comédie. El
subjuntivo inscribe mi pensamiento en lo virtual. Hay también un aspecto
fundamental en algunos ejercicios de lógica que yo denomino el condicional
contrafactual. “Si yo fuese un elefante, tendría colmillos.” Esta oración es
verdadera aunque yo no sea un elefante. Es preciso el subjuntivo para subrayar
esta potencialidad. El dominio del subjuntivo permite establecer en el discurso
una distinción entre lo que es virtual y lo que es real. En este sentido, la
desaparición del subjuntivo amenaza con diluir aún más esta diferencia. Quizás
exagero, pero me pregunto si esto no corresponde a nuestra tendencia, en la era
informática, a confundir cada vez más lo virtual con lo real.
Umberto Eco.