GERTRUDE BELL
«Me invitó a tomar el té. Me recibió
sentada junto a una mesita de té perfectamente inglesa, colocada bajo una
polvorienta palmera en el jardín de dátiles que circundaba su villa. No había
ninguna otra mujer. Los invitados eran jóvenes de uniforme, la mayor parte
miembros de su plana mayor. Nada más verla decidí que la Reina Virgen tenía que
haber sido precisamente así. Era una inglesa más bien pequeña y con cara de
caballo —me parece recordar que su cabello era rojizo tirando a gris— pero
había algo de majestuoso en su persona. Tenía un increíble dominio de las
lenguas del Oriente Medio. Conocía todos los dialectos. Sabía al dedillo las
historias tribales y familiares de los Bedawi. Viéndola, no era difícil creer
lo que me habían contado de cómo llegaba en su avión a los campamentos de los
árabes rebeldes y les soltaba tales rapapolvos en su propio dialecto que
inmediatamente recogían sus tiendas y desaparecían.»
John dos Passos.
Años inolvidables.
Alianza Editorial.