«Me pregunto si con el tiempo me voy a encontrar con que
aun la media taza que me tomo a la hora del almuerzo no me deja dormir. J. R.
está tan afectado mentalmente con la situación de España que me tiene muy
preocupada. Anoche, creyendo que yo dormía, se puso a hablarle a España como un
triste enamorado. Una de estas noches me voy a incorporar y a contestarle. Si
nos hubiéramos quedado en España se hubiera vuelto loco en tres meses. »
Zenobia Camprubí.