EL SANT GERVASI DE PLA
«Lo encontraba muy curioso. Es un pueblo de villitas y casitas con una
puertecita y unas ventanitas y unos jardincitos con unos arbolitos y caminitos
con surtidorcitos con pececitos y dibujitos de piedrecitas y tejaditos con unas
terracitas. En estos jardincitos suele haber gallineritos con pollitos y, a
veces, con un conejito que saca el morrito. Hay conventos de monjitas, clínicas
con enfermitos, fabriquitas con obreritos y tranviítas de vía estrechita. El
uso del diminutivo me sale espontáneamente, no porque las monjas, los
surtidores y los enfermos de Sant Gervasi sean de un tamaño más reducido que
los de los otros sitios, sino porque la vista, acostumbrada a las
aparatosidades de Barcelona, me hace ver Sant Gervasi como un pueblo en
miniatura. La proximidad del contraste aumenta más la ilusión. Claro: los de
Sant Gervasi tienen las mismas dimensiones que los otros hombres, comen en
platos y usan zapatos de las mismas medidas que la mayoría de la gente. Pero
esto no quiere decir que Sant Gervasi no parezca una miniatura.»
Josep Pla.
El cuaderno gris.
Ediciones Destino.